De la nada, comienzas a sentir un hormigueo por los pies. O tal vez es un entumecimiento en tus manos y dedos. Quizás experimentes palpitaciones, dolor o calambres en los músculos. Parece que estás lidiando con problemas de circulación, pero no tienes por qué vivir con ellos.
Afortunadamente, hay varios métodos que contribuyen a mejorar la circulación, uno de los cuales es la estimulación muscular eléctrica (EMS). Hablemos más sobre problemas de circulación y cómo nuestros electroestimuladores pueden ayudarte.
Nos gustaría ofrecerle un pequeño contexto antes de sumergirnos.
¿Qué hace tu sistema circulatorio?
Primero, vamos a tomarnos un breve momento para explicar qué es la circulación. Esto te ayudará a comprender mejor por qué la estimulación muscular eléctrica puede ayudar.
Tu sistema circulatorio, compuesto por el corazón y vasos sanguíneos, envía oxígeno y nutrientes a cada célula del cuerpo para que puedan realizar sus numerosas tareas. En realidad, tenemos dos sistemas circulatorios: circulación sistémica y circulación pulmonar.
La circulación sistémica le da sangre a tus órganos, células y tejidos para que reciban oxígeno y otras cosas que necesitan para hacer su trabajo. Con la circulación pulmonar, el oxígeno fresco que respiramos entra en nuestra sangre y el dióxido de carbono se libera.
En pocas palabras, estos dos sistemas trabajan juntos para ayudarnos a mantenernos vivos.
Apenas estamos rascando la superficie, pero aún queremos darte una idea de por qué es tan importante una circulación saludable. Sin ella, por resumir, tu cuerpo no podrá funcionar como debe. La circulación es vital.
Las causas de la mala circulación
Existen varias causas que producen una mala circulación de la sangre, como diabetes, coágulos sanguíneos, obesidad o fumar tabaco. Otro culpable es estar sentado en exceso, algo que gran parte del mundo está casi obligado a hacer gracias a nuestra cultura laboral.
Cuando te sientas demasiado tiempo, tu sangre se acumula y permanece en tus pies y piernas. Esto reduce el flujo sanguíneo. ¿Alguna vez has notado que cuando te sientas demasiado tiempo, tus piernas y pies comienzan a dormirse?
Además, sentarse puede contribuir a pellizcar los nervios. Combina esto con una mala postura y tendrás desastrosos resultados. Esto puede contribuir aún más a la mala circulación. (Nota: si estás lidiando con nervios pellizcados debido a estar sentado, puedes estar experimentando un dolor de espalda intenso. Nuestros electroestimuladores te ayudarán con el dolor de espalda crónico).
La solución ideal es sentarse menos y moverse más. También puedes complementar estos hábitos más saludables con estimulación muscular eléctrica para que tu flujo sanguíneo vuelva a la acción.
Pasemos a eso a continuación.
Cómo un electroestimulador puede ayudarte a mejorar la circulación
Uno de los muchos beneficios de la estimulación muscular eléctrica es que mejora la función de tu sistema circulatorio. Específicamente, funciona dentro de la circulación periférica, que comprende la circulación sistémica y la circulación pulmonar.
Ahora ya sabes que sentarse durante períodos prolongados puede causar problemas de circulación. Un buen electroestimulador contrarresta esto promoviendo el flujo sanguíneo incluso cuando los músculos no están en uso. Mantiene activos los tejidos musculares incluso cuando no puedes estar físicamente activo.
Nuestros electroestimuladores te ayudarán a mejorar el transporte, la distribución y la circulación de la sangre; la relación entre sangre y tejido; y el almacenamiento de sangre dentro del sistema venoso.
¿Qué significa esto? Pues que cuando tienes problemas de circulación sentirás un molesto hormigueo, entumecimiento, bajada de temperatura, pálpitos entre otras muchas.
Cuando usas un electroestimulador para mejorar tu circulación, los beneficios son muchos. El cuerpo no solo funciona de manera más saludable, sino que las células y órganos reciben los nutrientes y el oxígeno que necesitan y te sentirás mejor físicamente. La sangre que anteriormente estaba mayormente estancada se pone nuevamente en marcha. El hormigueo, el entumecimiento y otros síntomas disminuyen.
Y no olvides que tener una circulación saludable también promueve una curación y recuperación más rápidas. Véase el ejemplo en que, si haces un entrenamiento particularmente agotador, tus músculos se recuperarán más rápido de lo que lo harían de otra manera. La mejora de la circulación afecta al cuerpo por dentro como por fuera, con algunos resultados que puede que no notes, pero también muchos que sentirás.
Un electroestimulador para el dolor como resultado de una mala circulación
Dado que el dolor en los músculos y las extremidades es otro efecto secundario de los problemas de circulación, las personas a menudo buscan una forma de aliviar esta molestia tan persistente.
También puedes usar la función TENS que normalmente traen todos de serie. Puedes seleccionar el área de dolor, especificar qué tipo de dolor es (crónico, agudo, relacionado con lesiones, etc.) y, por último, establecer la tolerancia al dolor.
La mejor manera de abordar tus problemas de circulación es desde todos los ángulos. Trabaja en la raíz del problema para mejorar tu sistema circulatorio y el núcleo, y al mismo tiempo aborda cualquier dolor o molestia. Esta es la fórmula para mejorar la circulación.
Las unidades TENS han estado disponibles sin receta durante bastante tiempo. Sin embargo, muy pocos han ofrecido resultados probados y muchos menos por la FDA. Nuestros electroestimuladores son dispositivos fiables utilizados por todo tipo de personas. Desde los principiantes hasta los profesionales.